Todo el mundo sabe que la asequibilidad de la vivienda se ha visto afectada negativamente por el aumento de los precios y el aumento de las tasas hipotecarias, pero hay otra pieza en la ecuación de la asequibilidad los salarios.
Qué tanto gana una familia obviamente afecta lo fácil o difícil que es para ellos darse el lujo de tener casa propia. Debido a una economía que mejora, los salarios están comenzando a aumentar finalmente y eso afecta drásticamente la asequibilidad de la vivienda.
Según el Índice de asequibilidad de la vivienda de septiembre 2018 de la Asociación nacional de Realtors (NAR por sus siglas en inglés), los salarios han aumentado en todas las regiones del país:
Después de aplicar los salarios actuales, los precios de las viviendas, y las tasas hipotecarias a su ecuación del Índice de asequibilidad de la vivienda. El índice, aunque aún está más bajo que en esta temporada del año pasado (160.1 a 146.7), aumentó en el último mes (141.2 a 146.7). Para la metodología complete utilizada por NAR, haga clic aquí.
El porcentaje de los ingresos necesarios para poseer una vivienda también ha disminuido cada uno de los últimos tres meses. Actualmente se sitúa en el 17 %, que es sustancialmente menor que los números históricos.
En conclusión:
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